Si estas pensando en correr una maratón, realizar una competencia de ciclismo de ruta o MTB, simplemente empezar a realizar actividad física de resistencia, debes tomar en cuenta tu hidratación. La hidratación en el deportista es fundamental para evitar muchas patologías graves que se crean por la falta de electrolitos antes, durante y después de entrenamiento.
El ejercicio causa que el alza de las pulsaciones cardiacas al igual que la tasa metabólica, esto va a generar que la temperatura corporal aumente si es que los mecanismos para la misma no son activados, por ejemplo la transpiración. El aumento de la temperatura corporal en el ejercicio es normal, especialmente si estamos hablando de un ejercicio de intensidad leve en una zona cardiaca 1 ( 0-120 lpm), tanto para un ejercicio anaeróbico como aeróbico. Sin embargo en un ejercicio aeróbico de intensidad moderada a fuerte donde podemos estar en una zona 2 hasta una zona 5 (120-150 lpm), estos mecanismos de pérdida de calor mediante transpiración pueden verse afectados si el deportista no se encuentra correctamente hidratado para el ejercicio (Maughan & Shirreffs, 2010). La producción de calor es directamente proporcional a la intensidad del ejercicio, es por eso que una actividad intensa así sea un ambiente frío, puede causar el incremento de la temperatura corporal (Jeukendrup & Gleeson, 2019).
El deporte de resistencia se caracteriza por ser un tipo de actividad en donde se evidencian adaptaciones fisiológicas y metabólicas para poder mantener un esfuerzo físico de manera constante o por un periodo de tiempo muy largo. Estas distancias se conocen como maratón, ultra maratón, endurance, que puede correrse en las modalidades de caminata, trote, ciclismo ruta o montaña, con distancias desde los 21km, 42km, 35km, 100km, en adelante. Se habla de un promedio de actividad física de una hora en adelante, inclusive pueden llegar a correr 4-10 horas al día si hablamos de los ultra maratones de trail que pueden llegar a tener etapas de carrera dividida en días (Knechtle & Nikolaidis, 2018). Un deportista de esta rama deportiva debe tener en mente una correcta hidratación desde el periodo de pre temporada hasta el de temporada, hay que recordar que siempre están activos por lo que la deshidratación no ocurre solo durante sus competencias, si no también en los entrenamientos que no se hidratan correctamente (Hoffman & Stuempfle, 2014).
Para iniciar, se debe calcular los requerimientos hídricos de cada deportista, tomando en cuenta el género por ejemplo si hablamos de una atleta femenina, hay que tomar en cuenta desde el ciclo menstrual debido a que la pérdida hídrica aumenta debido a que su tasa metabólica basal aumenta por la pérdida de flujo sanguíneo, corriendo el riesgo de que sea más fácil sufrir una deshidratación (Konovalova & Konovalova, 2013). En ese caso, por ejemplo, es importante calcular cuánto líquido puede estar perdiendo la deportista, por eso es importante el pesar al deportista, en ayunas primera hora en la mañana, la semana pre menstrual y la fase ovulatoria. De esta forma obtendremos datos necesarios para calcular cuantos ml/kg de peso está la atleta perdiendo y cuántos electrolitos debemos reponer (Konovalova & Konovalova, 2013).
Para iniciar, se debe calcular los requerimientos hídricos de cada deportista, tomando en cuenta el género por ejemplo si hablamos de una atleta femenina, hay que tomar en cuenta desde el ciclo menstrual debido a que la pérdida hídrica aumenta debido a que su tasa metabólica basal aumenta por la pérdida de flujo sanguíneo, corriendo el riesgo de que sea más fácil sufrir una deshidratación (Konovalova & Konovalova, 2013). En ese caso, por ejemplo, es importante calcular cuánto líquido puede estar perdiendo la deportista, por eso es importante el pesar al deportista, en ayunas primera hora en la mañana, la semana pre menstrual y la fase ovulatoria. De esta forma obtendremos datos necesarios para calcular cuantos ml/kg de peso está la atleta perdiendo y cuántos electrolitos debemos reponer (Konovalova & Konovalova, 2013).